El entorno determina el resultado – Greg Waite

Todo es cuestión de equilibrio: nunca demasiado de una cosa sin suficiente de la otra.

La vida en la furgoneta es una extensión glorificada de la vida en la orilla. Cocino en la misma cocina, bebo del mismo barril de agua y me despierto en un entorno similar.

Es una manera de poder pasar de una afición a otra, y al mismo tiempo pasar los días en un entorno del que no puedo prescindir. Me he dado cuenta de que me gustan las aficiones que son más bien estilos de vida individuales que meras actividades. La vida en furgoneta me permite dedicarme a una afición tanto como me sea posible. Al no tener que "volver a casa" nunca, puedo pasar rápidamente de una cosa a otra, y al mismo tiempo concentrarme por completo en lo que estoy haciendo.

Por ejemplo, si me gusta la bicicleta de montaña, vivir en una furgoneta significa que puedo ir a un sendero, darlo todo durante todo el día, darme una ducha caliente y luego dormir en el aparcamiento sin sacrificar la comodidad. Esto suele significar que puedo ir día tras día, sendero tras sendero, sin sentirme nunca como si estuviera "pasando por un mal momento". Me permite hacer girar toda mi vida en torno a la bicicleta durante ese breve periodo de tiempo.

Luego está el surf. En lugar de simplemente llegar a un lugar, coger algunas olas y luego volver a casa, puedo continuar hasta que la luz del atardecer se disipe, casi hasta el punto en que empiezas a perder el sentido de la percepción, sabiendo perfectamente que estaré caliente, seco y en mi casa en no más de 10 minutos. Si las condiciones al amanecer sugieren que conseguiré una mejor ola en otro lugar, puedo ponerme en camino sabiendo que todavía podré meterme al agua y disfrutar de la mañana antes de empezar a trabajar.

Y, por supuesto, está la pesca, la única actividad que realmente combina a la perfección con la vida en furgoneta. Poder prolongar las sesiones y estar cómodo durante todo el año es una gran ventaja. No te importa ir en barca hasta el rincón más alejado del lago, sentarte en el lugar más embarrado o quedarte despierto toda la noche mirando el agua, sabiendo que tienes una ducha caliente, una cama cómoda y una nevera llena de comida aparcada cerca.
"Debería haberme ido de aquí el domingo por la mañana, ya es miércoles por la tarde", es algo que los muchachos del otro lado del charco me escuchan decir muy a menudo.

Ya sea cazar carpas en los lugares más fantásticos o pescar con mosca en un arroyo de tiza, todo es posible con mucho menos esfuerzo del que hubiera requerido antes de tomar la decisión de vivir a tiempo completo en la parte trasera de una furgoneta. Por ese motivo, puedo dedicarme exactamente a lo que quiero obtener de estos "pasatiempos".

“Los grandes riesgos te dejan grandes recompensas… no puedes esperar grandes recompensas asumiendo pequeños riesgos”.

Y, por último, mi cámara, esa pequeña caja de metal que une todo de forma hermosa. Es una forma de expresarme y de convertir mi estilo de vida en una forma de arte, una forma de ganarme la vida que facilita la vida en la carretera y una forma de documentar las aventuras, los lugares locos y la gente increíble que conozco en el camino. Creo sinceramente que me apasionan las cosas que tienen un aspecto agradable, ya sea un cielo enorme con vistas que se extienden a lo largo de kilómetros o un simple haz de luz que capta un objeto de una forma genial. A menudo son los pequeños detalles de algo los que realmente me cautivan y la fotografía es la forma perfecta de compartir mi visión de ello con los demás.

Solo quiero decir que todo lo que he dicho ha sido un sueño, una visión durante años, algo en lo que me he concentrado profundamente mientras estoy en ese estado mental subliminal e impresionable en el que te encuentras justo antes de quedarte dormido y justo después de despertarte. Con mucho trabajo duro y pensamiento estratégico, de alguna manera he logrado hacer de este estilo de vida una realidad diaria.

Dicho todo esto, estoy lejos de la meta final, lejos de alcanzar mi potencial y lejos de cualquier forma de satisfacción. Siento que los últimos dos años han sido una lenta introducción al resto de mi vida. Soy muy consciente de que todo esto es temporal y que tengo muchos más altibajos por delante, al igual que el viaje que me llevó llegar hasta aquí. Lo creas o no, vivir en un viejo cobertizo de vacas en la campiña de Cornualles en pleno invierno, sin agua corriente ni electricidad, ha sido parte de este viaje hasta ahora. ¡Alabado sea el Señor por las Bedchairs de Nashy!

Me gustaría terminar con una frase que me guía en mi vida: “El entorno determina el resultado”. Tu entorno no solo determina el momento presente, sino que te moldea como persona. Ser consciente de tu entorno y del efecto que tiene sobre ti es algo que valoro mucho. Supongo que es una forma de guiarte hacia la persona en la que quieres convertirte.

• Greg Waite